Carlos Vives y Gustavo Dudamel se unieron para dar un cierre espectacular a la residencia artística “Voces del Futuro”, con un concierto inolvidable en el Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo. El evento se realizó el jueves 17 de octubre y contó con la participación de 169 niños y jóvenes de diversas orquestas juveniles provenientes de Colombia, Venezuela, Brasil, Ecuador, Argentina y Bolivia.

David García, director de la Filarmónica de Bogotá y uno de los organizadores del evento, declaró que este proyecto fue posible gracias a la colaboración de varias instituciones, como el Ministerio de Cultura, la Filarmónica de Bogotá, la Filarmónica de Los Ángeles, Batuta, el Sistema Nacional de Orquestas de Venezuela y la Asociación Nacional Sinfónica de Colombia. La cooperación entre estas organizaciones permitió reunir a jóvenes músicos de varios países para formar parte de esta residencia artística, que tuvo lugar en Cajicá.

Según García, la idea de este proyecto nació a partir de una colaboración previa con Dudamel, quien ha trabajado con la Filarmónica de Bogotá desde 2012. Gracias a los vínculos que el director venezolano estableció con la Filarmónica de Los Ángeles, a través de su programa YOLA (Youth Orchestra Los Angeles), se pudo incluir a jóvenes músicos de diferentes naciones en esta residencia pionera en la región. Los participantes, todos entre 13 y 17 años, pasaron una semana en Cajicá ensayando bajo la dirección de maestros especializados en violín, viola y violonchelo, formando finalmente una orquesta sinfónica de 169 músicos.

Gustavo Dudamel dirigió los ensayos generales y, el día del concierto, sorprendió al público al presentar a Carlos Vives como el invitado especial. Vives no solo emocionó a los jóvenes músicos, sino que también expresó su entusiasmo por colaborar en un proyecto que fomenta la formación de nuevos talentos a través de la música.

Durante el concierto, Dudamel expresó su gratitud hacia Ramiro Osorio, director del Teatro Mayor, por impulsar este proyecto y destacó la importancia de la música como un espacio de unión en un mundo lleno de divisiones. «Estos jóvenes han ensayado solo por unos días, pero suenan como una orquesta profesional», señaló Dudamel, refiriéndose al impacto de la experiencia artística que compartieron.

En sus palabras al público, Dudamel presentó a Carlos Vives como un gran amigo y admirador de su obra, subrayando la influencia transformadora del artista colombiano en la vida de muchos jóvenes a través de la música. La colaboración de ambos fue aclamada por los asistentes y marcó un momento clave en la celebración.

Este tipo de proyectos demuestran que, a pesar de las fronteras, la música tiene el poder de unir mundos diferentes y generar cambios profundos. «La música no es solo una herramienta artística, sino una fuerza fundamental para la transformación cultural y social», concluyó García, expresando su visión de un mundo sin fronteras gracias al poder del arte musical.

Lcdo. Fernando Martínez
CNP: 11.805